sábado

“La producción de biocombustibles es un crimen contra la humanidad”



No hace demasiado tiempo pensábamos que sustituir los combustibles fósiles por combustibles derivados de los productos agrícolas iba a ser toda una revolución. Pero pasado unos años, vemos que las consecuencias de esta nueva estrategia ha producido más desgracias que beneficios. No solo lo piensan cientos de comunidades indígenas o asociaciones defensoras del medio ambiente, sino que es una realidad que se ha denunciado en las propias Naciones Unidas.
La frase de Jean Ziegler, ex miembro especial para la comisión de Derechos a la Alimentación de la ONU dio la vuelta al mundo: La producción de biocombustibles es un crimen contra la humanidad”.
Pero ni a los políticos ni sus intereses en la industria les llegó el mensaje.
Sin las elevadas importaciones de aceite de palma y de soja barato para las centrales eléctricas, los gobiernos de Alemania y de la Unión Europea no podrán jamás alcanzar sus ambiciosas metas de “Bio-energía”.
La pasada década se multiplicaron por cuatro las importaciones de aceite de palma en Alemania y otros países occidentales. 



Los más de 400 millones de litros de aceite de palma utilizados en las centrales eléctricas equivalen a 110.000 hectáreas de plantaciones de aceite de palma: una superficie de bosques donde vivían 1000 orangutanes. Los principales países de procedencia de las importaciones alemanas de aceite de palma son Indonesia, Colombia, Malasia y Papua Nueva Guinea.

El aceite de palma destruye las selvas
Sólo el gobierno brasilero planifica la implementación de unos 30 millones de hectáreas de palma en la Amazonía. Según la FAO, cada segundo desaparece en todo el mundo una superficie de selva equivalente a medio campo de fútbol.

El aceite de palma acaba con la biodiversidad
Para efectuar los monocultivos de palma se elimina toda la vegetación preexistente, utilizando grandes cantidades de pesticidas y herbicidas. Con las selvas tropicales mueren cada año más de 50.000 especies de animales y plantas, según estiman los expertos.

El aceite de palma destruye las fuentes del sustento de las personas
La mayoría de los pequeños campesinos que viven en los países del sur no poseen títulos de las tierras y las plantaciones de palma aceitera los desplazan de sus tierras, son detenidos o asesinados si se oponen a que les roben las tierras. Para muchos de estos campesinos, la selva constituye la fuente de su sustento: los árboles, frutas y animales les dan vivienda, alimento y fuerza espiritual.

El aceite de palma conduce al aumento de los precios de los alimentos
En los países del Sur se disparan los precios de los alimentos. Entre otras razones la causa está en la combustión de productos agrícolas para el abastecimiento europeo de energía. Cada punto porcentual de aumento de los precios significa 16 millones más de hambrientos. Por ejemplo en Indonesia, muchas personas pobres no pueden ya permitirse comprar aceite de palma, ya que los precios han aumentado considerablemente por la gran demanda.

El aceite de palma calienta el clima
La tala, sequía y quema de los bosques liberan alrededor del 20 porciento de las emisiones de carbono del mundo. Indonesia es el tercer emisor de CO2 del mundo a causa de la deforestación.

Desde este blog apoyamos las campañas de muchas personas y organizaciones en defensa de un planeta más en consonancia con la herencia de biodiversidad recibida de nuestros antepasados.

¡No a las importaciones de productos agrícolas para la producción de energía!
¡No al fomento de la generación de energía a partir de biomasa!




2 comentarios:

  1. El caso es que los que lo incorporan a su consumo energético (y pagan)son también los que habitualmente deciden sobre la economía mundial.
    ¿Sinceramente cabe esperar un cambio, cuando los que lo piden son los de más abajo?
    Por si acaso, pondré una vela y se lo pediré a un santo. ¿Cuál es el de las causas imposibles?
    Pero que conste que me parece una vergüenza.
    GRETA N.

    ResponderEliminar
  2. Los científicos no prevén las consecuencias de sus inventos. Todas las nuevas materias energéticas deben de estudiarse mejor.

    ResponderEliminar